Son incontables los casos en los que la comunicación de la marca hacia su público falla, es decir: logos que no se entienden, publicidad mal enfocada, tipografías difíciles de leer, colores que no atraen; todos son síntomas de que la marca necesita un ajuste.

Si bien no existe una regla general que determine cuándo se debe renovar una marca; sí existen circunstancias que alertan sobre la necesidad de un cambio, como las siguientes:

  1. La imagen quedó rezagada con respecto a la competencia: con el paso del tiempo, los consumidores cambian y marcas nueva nacen enfocadas en estos nuevos consumidores, presentándoles una línea más atractiva y fresca; tu marca no se puede quedar atrás respecto a la competencia.
  2. La estrategia del negocio ha cambiado: pensá en tu marca cuando nació, probablemente pensaste en diferenciarte de la competencia y enfocarte en un público específico. Hoy en día con el crecimiento que ha experimentado tu negocio, esa diferenciación evoluciona y puede ser que la marca ya no la represente de la misma manera.
  3. La imagen gráfica no se adapta al mundo digital: con la llegada de la era digital, las marcas se han visto en la necesidad de evolucionar para no desaparecer. Un cambio de identidad de marca puede ir enfocado en lograr una correcta proyección a través de la web de la empresa, redes sociales, boletines electrónicos, entre otras plataformas.

Un ejemplo exitoso de renovación es nuestro cliente SuCasa Market, que nace de la cadena de supermercados SuCasa. La empresa identificó que tenía en San Carlos un nicho de mercado diferente, que no encajaba con la línea de la marca tradicional.

Para enfocarse estratégicamente a este nicho se necesitaba una renovación gráfica de marca que le permitiera conectar con este público. Además con la suficiente versatilidad de adaptarse a las plataformas digitales donde actualmente se encuentra participando su público objetivo.

Descubrí aquí el caso completo de la renovación de SuCasa Market

Si indentificaste que tu marca presenta alguno de estos síntomas, una renovación podría ser el impulso que necesitás para alcanzar tus metas y mantenerte competitivo en un mercado en crisis, donde solo los que evolucionan siguen en pie.